En la naturaleza, existen tres mecanismos de acción esenciales que han purificado el agua de este planeta, probablemente desde el comienzo de los tiempos:
- la fuerza de succión del remolineado del agua;
- la ozonización (Envirolyte) y la carga eléctrica contra la putrefacción y los parásitos (que en la naturaleza son los relámpagos que caen sobre los océanos salados), y
- la filtración (con carbón activo) sin presión por las capas carbonizadas de la tierra.
En este texto me centraré en la filtración mecánica con filtros de carbón activo. Por supuesto, también existen numerosos filtros de membrana que filtran el agua a alta presión por membranas semipermeables de diferentes tamaños de poro. Pero aquí trataremos la filtración natural del agua potable con carbón activo. De hecho, este es el método de filtración más eficaz para obtener agua potable verdaderamente pura y natural.
Para comprender mejor cómo funciona el filtro de bloque de carbón activo y por qué es necesario, hay que saber en qué consiste realmente la filtración de agua con carbón activo. Un factor esencial es la capacidad de adsorción a través de los poros de la madera carbonizada. Los contaminantes quedan retenidos en el carbón activo gracias a un ligero efecto de succión. El carbón activo obtenido de las cáscaras de coco ha demostrado ser especialmente adecuado por la infinidad de pequeños poros que posee. Pero también se recurre a otras materias primas, como el betún, las cáscaras de almendra u otros tipos de madera carbonizada. El proceso de carbonización abre los poros del material, que luego se limpian a alta temperatura (aproximadamente entre 700 y 1100 grados) con vapor caliente a una ligera presión para formar polvo limpio de carbón activado. Este proceso es el principio con el que se obtienen las diferentes calidades de los posteriores bloques filtrantes de cáscara de coco. Las distintas empresas cuentan con diferentes patentes de este proceso. De este modo se obtiene el material básico con el que se fabrican los bloques de carbón activo para la filtración natural del agua potable.
Básicamente, los bloques filtrantes de carbón activo se pueden fabricar mediante dos procesos diferentes. La masa de carbón activo purificada puede extruirse o sinterizarse. Aunque ambos bloques filtrantes tienen un aspecto similar, su estructura es completamente diferente.
• Filtros de bloque extruidos:
Para fabricar filtros de bloque de carbón activo extruido, el polvo de carbón activo se mezcla con diversos plásticos, después se vierte en moldes de cocción y se cuece en hornos. Así se fabrican los cartuchos filtrantes de carbón activo extruido. El polvo de carbón activo purificado suele comprarse a grandes proveedores. El aspecto exterior de estos cartuchos filtrantes es muy similar al de los bloques filtrantes sinterizados. Sin embargo, se trata de un proceso de fabricación muy sencillo en el que un gran número de los poros, que son los que constituyen la filtración propiamente dicha, se apelmazan.
• Filtros de bloque sinterizados:
Los filtros de carbón activo sinterizado están hechos enteramente de carbón activo, con una cantidad mínima de aglutinante semisólido neutro con muy poca capacidad aglutinante, comprimido mediante prensado y presión externa hasta formar los bloques filtrantes. El proceso de sinterización es bastante complejo y requiere muchos pasos individuales. La elección del aglutinante y el porcentaje de esta masa semisólida de polipropileno, así como la temperatura y las etapas de presión, son pasos de trabajo decisivos a fin de obtener la consistencia deseada sin que se apelmacen los poros del filtro.
El secreto de los bloques filtrantes de carbón activo de la Casa Carbonit reside en la acción de los finísimos poros y canales del interior del bloque filtrante. Un área muy pequeña de la superficie filtrante de un solo bloque filtrante es comparable al tamaño de un campo de fútbol. En los finos canales quedan atrapados incluso contaminantes que son más pequeños que el tamaño de los poros de la masa de carbón activo. Este es otro paso en la fabricación de los monobloques sinterizados, para el que la empresa fabricante alemana Carbonit tiene su propia patente.
Carbonit es una empresa familiar de larga tradición que fabrica sus propios cartuchos filtrantes desde hace tres generaciones. Para su fabricación se utiliza el polvo de carbón activo de alta calidad previamente procesado procedente de las cáscaras de los cocos. Los filtros Carbonit se utilizan en la tecnología médica, la industria farmacéutica y de bebidas, así como para el abastecimiento móvil de agua en barcos, trenes, aviones y autocaravanas. Con el tiempo, el ámbito de aplicación se ha ido ampliando hasta incluir también los hogares particulares y todos los ámbitos en los que se necesita agua potable pura. Los cartuchos de carbón activo de Carbonit se someten a pruebas continuas y están considerados como los mejores cartuchos filtrantes para obtener agua potable sana, natural y pura.
El carbón activo tiene la mayor capacidad de adsorción de todas las sustancias filtrantes conocidas. Su gran fuerza de adsorción permite filtrar incluso los gases, eliminar los olores y que los contaminantes más pequeños se adhieran a los poros del carbón activo y queden retenidos allí. Las fuerzas que provocan esta adhesión no son enlaces químicos, sino «fuerzas de Van der Waals» que actúan con gran fuerza a distancias cortas. De forma similar a las fuerzas magnéticas, se debilitan con el uso debido a la capa de contaminante que se va depositando, por lo que el cartucho debe sustituirse cuando pierde su fuerza de retención. Esto se aplica a todos los contaminantes. Bacterias, parásitos, pesticidas, herbicidas, lindanos, fungicidas, exceso de nitratos, glifosato, residuos de hormonas, residuos de medicamentos, plastificantes, microplásticos, cloro, plomo y otros metales pesados, así como toda una serie de toxinas, quedan retenidos en los cartuchos hasta que los poros se saturan en la masa de carbón activo.
A la pregunta de si la cal y el aluminio pueden eliminarse del agua mediante el carbón activo no se le puede dar una respuesta rotunda de sí o no. Por supuesto, los cristales grandes de cal y la gran mayoría de los compuestos de aluminio son filtrados por el carbón activo. Ahora bien, la cal presente en el agua, por ejemplo, pertenece a las sales minerales esenciales que, al igual que el propio carbón activo, tienen una ionización negativa y, por tanto, no se adhieren, sino que solo son retenidas mecánicamente por el filtro si la estructura cristalina es lo bastante grande. Los iones de cal, que se convierten en cristales de cal después del proceso de filtrado al adherirse a otras sustancias, no se pueden retener. Por tanto, la cal solo puede eliminarse por retención en una medida más bien pequeña, ya que la mayor parte de la cal en el agua no está en ella como sustancia filtrable, sino en forma ionizada. Existen algunas soluciones técnicas de descalcificación para filtrar la cal del agua. No obstante, excepto el procedimiento que consiste en provocar la cristalización de los iones de cal y su posterior filtración mecánica (Agua Viva trabaja con Impfkristalle de AquaKalko Inova), casi todas las demás medidas tienen una gran influencia en la calidad del agua.
En lo que respecta al aluminio, la situación es algo diferente. De hecho, la gran mayoría de los compuestos de aluminio son filtrados completamente por los cartuchos filtrantes NFP de Carbonit. No obstante, el elemento aluminio forma parte de la corteza terrestre natural como componente sólido de algunos compuestos químicos y no puede eliminarse por completo, ya que se encuentra en forma ligada incluso en frutas y verduras. En su forma ligada, es el tercer elemento más frecuente después del oxígeno y el silicio y el primer metálico. Para poder hacer afirmaciones concretas sobre la eliminación completa del aluminio es necesario realizar complejos análisis del agua directamente en los respectivos puntos de extracción, para lo cual hay que tener en cuenta muchos más parámetros a fin de determinar el tipo de aluminio.
Es bien sabido que el agua potable es importante. Pero cuán importante es la calidad del agua de la ducha o del baño diario, lo he podido volver a experimentar por mí misma este verano con el agua vitalizada, por lo que recomiendo situar la calidad del agua en el primer lugar de su lista de prioridades, aunque solo es una buena filtración para empezar.
Un pequeño ejemplo: nos centramos en la salud del pez en el acuario. Pero si el agua que lo rodea está envenenada, el pez no puede recuperarse.