¿Qué debemos hacer con la cal contenida en el agua?

Que el agua dura calcifica y deteriora rápidamente lavadoras y calentadores de agua está claro. De ahí que la instalación de equipos descalcificadores de agua suene tentador. Pero, ¿cómo influye el agua dura sobre nosotros? Un buen té tiene un sabor horrible si el agua tiene exceso de cal. La cal contenida en el agua se compone principalmente de calcio y magnesio – dos de los minerales que en sí mismos tienen un efecto saludable sobre el cuerpo humano. Por lo tanto, y con el fin de tranquilizarles, las calcificaciones son perjudiciales para los calentadores y las tuberías de agua.

Quien ingiera más calcio del que el cuerpo pueda utilizar, simplemente eliminará el exceso de calcio de su cuerpo. La arteriosclerosis no tiene nada que ver con la cal – las arterias pierden su elasticidad debido a la ingesta de ciertas grasas en combinación con proteínas no digeribles, no debido al carbonato de calcio. La cal tampoco produce cálculos renales, todo lo contrario: el exceso de cal se almacena durante algún tiempo en el intestino, donde antes de salir se une precisamente con las moléculas dañinas que pueden conducir a los cálculos renales. Además, ¡el agua dura generalmente también suele contener mucho magnesio por lo que tiene un efecto positivo sobre el corazón!

Pero, lo que es bueno para el hombre, no lo es tanto para los equipos técnicos, las tuberías de agua o los tanques de agua caliente. Cuando la cal se cristaliza provoca persistentes capas adherentes en las tuberías, intercambiadores de calor y griferías de baño. La vida útil de los dispositivos técnicos depende en gran medida de si es posible prevenir estas calcificaciones.

Debido a la calcificación se forman una especie de “zonas muertas” (cavernas) en las tuberías de agua, que hacen que resulte más fácil para las bacterias multiplicarse en estos nichos. El tratamiento físico del agua contra la cal trata de reducir estas capas de cal fuertemente adheridas.

La producción de semillas de cristal en el cuerpo del agua es desde 2003 el método alternativo reconocido para la reducción de depósitos de cal sobre las superficies, sin aditivos ni productos químicos. Esta es la ayuda biológica ideal contra la cal.

Biomineralizacion: descalcificadores de agua ecológicos

La protección contra la cal libre de productos químicos gracias a los llamados cristales semilla, es un tratamiento de agua reconocido desde 1995. Se utilizan gránulos de cerámica con una superficie especial para poner en marcha el proceso de la llamada catálisis heterogénea. Un proceso similar se puede observar en la naturaleza en conchas y corales. El agua del grifo fluye alrededor del granulado. En cuestión de segundos se forman sobre la superficie de los gránulos pequeños cristales. Estos serán transportados por el agua a través de todas las tuberías y aparatos conectados. Capturan la cal que ya no podrá cristalizarse sobre ninguna superficie. De esta forma incluso se pueden disolver calcificaciones previamente existentes. Lo que permanece es una dura capa de magnesio que sirve como película de protección. Se pueden sanear tuberías calcificadas en aprox. 6 a 9 meses, ya que también las calcificaciones existentes se disuelven en un proceso lento y suave. El agua no se ve alterada en su composición química.

La desventaja de la descalcificación biológica es que no reduce los depósitos de las superficies. Simplemente permite una limpieza más fácil. El efecto de los cristales semilla sobre el agua es comparable a la diferencia entre copos de nieve o sólidos bloques de hielo cayendo sobre el parabrisas de un automóvil.

Los sistemas de descalcificación convencionales funcionan por medio de intercambiadores de cationes. Los intercambiadores de cationes trabajan con resinas de intercambio con carga negativa. Sobre la superficie se acumulan los cationes cargados positivamente procedentes del agua. Después de cierta cantidad de agua, la resina ya no puede absorber mas cationes y deberá ser limpiada para eliminar los depósitos e incrustaciones y cargada de nuevo con iones de sodio.

A parte de la gran contaminación del medio ambiente y el consumo de agua, el fraccionamiento de la estructura del agua siempre esconde un alto riesgo de contaminación microbiana. Además, el contenido de sodio en el agua resultante está por encima de los límites y afecta considerablemente a la función de nuestro corazón y sistema circulatorio.

Dado que el proceso de descalcificación también altera el equilibrio calcio-ácido carbónico, se libera más cantidad de dióxido de carbono. Esto reduce el valor pH. El agua es agresiva y libera sustancias de los materiales por los que fluye.De aquí se deduce que en realidad no existe la solución óptima contra la cal en el agua. A esto hay que añadir que es concretamente el compuesto de cloro del agua el que endurece nuestra piel y mata el brillo de nuestro pelo.